Seguramente, el salario es uno de los factores más decisivos para el trabajador para decidir si acepta un nuevo trabajo o quedarse en el que está, si se trata de un aumento de sueldo. Siempre se busca una remuneración justa, que se valoren las capacidades del empleado para que esté satisfecho y motivado en sus funciones.
Conozca cómo puede aumentar las posibilidades de éxito en este tipo de negociaciones.
1. Realizar la pregunta adecuada en el momento adecuado para llevar la negociación hacia donde te interesa. Desaparecerá así la tensión y la incomodidad.
2. Aportar datos concretos sobre lo que se cobra actualmente en el sector.
3. Demostrar los puntos fuertes mediante argumentos sólidos.
4. Dar la primera cifra y que sea alta. Esto tiene un efecto psicológico sobre el jefe porque su mente no tiene ningún valor con qué compararlo más que la oferta inicial. Si das una cifra no redonda, como 1350, el jefe tenderá a negociar en tramos de cien, y no de mil.
5. Cuando el jefe ofrezca su primera oferta no la acepte, ya que seguro que está dispuesto a dar algo más.
6. Dejar por escrito todo lo que se ha negociado y las condiciones.
7. Tener seguridad y convicción en uno mismo sin dejar de ser flexible. Se puede negociar: trabajar desde casa, la salud privada, incentivos, dietas, vacaciones, formación…
8. Provocar respuestas afirmativas.
9. Aprovechar los silencios haciendo pausas retóricas. Hay que decir lo que se quiere y esperar la respuesta sin prisa.
10. Escucha activa: leer entre líneas y repetir lo que va diciendo el jefe demuestra comprensión. Adaptarse a su forma de comunicar (gestos, lenguaje), también.
Teniendo en cuenta estos consejos y confiando en usted mismo, su habilidad negociadora va a mejorar. Es así como conseguirá llegar a un acuerdo que le sea beneficioso.